CINE ARTE ZEN
Es el arte
del no hacer y del no saber.
Es el arte
del silencio y de la inocencia.
Es el arte
de dejar ser y hacer.
El Cine Arte
Zen puede carecer de actores, afeites, escenografías, producción, iluminación, guión y dirección. Se puede actuar en soledad, silencio y pulcritud en espacios
abiertos, naturales, urbanos o microscópicos.
Es el arte
cinematográfico donde el monje, la cámara y el mundo se unen en el silencio
interno y la meditación. El acto es el no hacer y la actitud mental es el no
saber. El punto de vista de este arte es la inocencia.
El monje, la
cámara y la imagen-sonido se unen en un solo acto zen.
De pronto,“eso”
ejecuta el cine y no la manipulación innecesaria. Sin embargo, hay pericia
técnica, elaborada pacientemente.
El montaje
es el enmarque del cuadro para ser expuesto como un arte. Y se ejecuta como la
filmación, con toda la libertad que
otorga la tecnología.
El “tono” es
la simplicidad voluntaria.
El mensaje
es el vacio, el silencio, la pausa, la no mente, la no intención.
Deja que la
naturaleza de las cosas se manifieste con libertad.
Todo el
desarrollo se realiza en humilde búsqueda y profundidad interior. Dando el
tiempo necesario y paciente.
El monje en
estado de meditación y silencio interno, coge la cámara y se interna en el
paisaje sin interrumpirlo. Se incorpora a él y lo comprende en una sola unidad
consigo. En estado de contemplación observa el paisaje atraves del visor de la
cámara y deja que ella busque, con su pericia óptica, el misterio de las cosas
del cosmos; sus movimientos, formas , colores y ritmos.
Va grabando
en contemplación las escenas gratuitas que cruzan la lente como la música
natural que circunda. Graba la magia de las escenas que surgen espontáneamente
como un presente otorgado por el cosmos. Sin una actitud ganancial, los
elementos se funden en un solo acto.
La visión
contemplativa requiere fijar el punto de vista del Zen que es vaciar la mente
para potenciarla hasta la iluminación o estado de despierto. Por esto que el
Cine Arte Zen es una herramienta de trabajo interno y una real técnica de
meditación que utiliza el monje. Requiere de un adecuado entrenamiento para
lograr el vacio mental espacio necesario para ejecutarlo. De otro modo, este se
teñirá de falsas intenciones, pretendiendo resultados exitosos. Denotando la
tensión del músculo y del cerebro.
La
naturaleza guarda su esencia enredada en sus misterios y profunda belleza. La
cual, sin manipulación se entrega aceptándose el caos y el azar como cosa
natural en el desarrollo de este arte.
Tanto la
pericia técnica como la preparación interior se adentran en el espacio gratuito
y libre, ejecutando el acto artístico en plena aceptación.
El cosmos,
rico en imágenes musicales, rodea al mundo interno el cual vibra al unísono de las formas
universales las que son comprendidas y gozadas en contemplacion con naturalidad.
El Cine Arte Zen podría pertenecer al género
de documentales y en la especialidad de documentales contemplativos. Cosa que
aún no he conocido en el mundo del cine y que desde 1999 estoy realizando en mi
productora de la Galeríazen en el Valle de Elqui, Chile. En la actualidad se
realizan talleres de Cine arte Zen.
Fernando Valdés. Invierno
de 2012.
